Evolución de la resistencia a ciprofloxacina y otras quinolonas en bacterias clínicamente significantes

La incidencia de resistencia a las fluoroquinolonas se ha incrementado drásticamente en los últimos años, presentándose en todas las especies bacterianas. Dicha resistencia se ha descrito, principalmente, en aislamientos nosocomiales; sin embargo, reportes recientes a nivel mundial, describen resist...

Full description

Bibliographic Details
Main Authors: B Harris, M Castellano, M Ginestre, A Martínez, S Romero, G Rincón
Format: Article
Language:Spanish
Published: Universidad de Zulia 1999-09-01
Series:Kasmera
Online Access:https://produccioncientificaluz.org/index.php/kasmera/article/view/4659
Description
Summary:La incidencia de resistencia a las fluoroquinolonas se ha incrementado drásticamente en los últimos años, presentándose en todas las especies bacterianas. Dicha resistencia se ha descrito, principalmente, en aislamientos nosocomiales; sin embargo, reportes recientes a nivel mundial, describen resistencia entre bacterias responsables de infecciones adquiridas en la comunidad. Por su amplio espectro de actividad, la ciprofloxacina (CIP) es la quinolona más ampliamente utilizada y su sensibilidad o resistencia se determinó a 2.540 cepas entre enlerobacterias, bacilos Gram negativos no fermentadores de la glucosa y cocos Gram positivos, distribuidos como sigue: E. coli (703), K. pneumoniae (358), E. cloacae (130), P. mirabilis (121), M. morganii (43), E. Agglomerans (40), E. aerogenes (27), C. freundii (18), C. diversus (14), S. marcescens (8), otras especies de enterobacterias (29), Ps. aeruginosa (311) , Acinetobacter genoespecies oxidativas (107), Acinetobacter genoespecies inactivas (75), S. aureus (439), Enterococcus sp. (54) y Staphytococcus coagulasa negativa (SCN) (63). Estas cepas bacterianas fueron recolectadas consecutivamente entre los años 1992-1997 de pacientes ambulatorios. Se utilizó el método de difusión en agar para determinar los patrones de susceptibilidad a CIP. A 468 aislamientos obtenidos de urocultivos, se les determinó, además, la susceptibildad al ácido nalidíxico (AcN), cinoxacina (CIN) y norfloxacina (NOR). La resistencia obtenida para cada bacteria es la siguiente: E. coli: CIP (11 %),CIN (11 %), NOR (10%) y AcN ( 15 %), K. pneumoniae CIP (7%),CIN (14%), NOR (13%) y AcN (20%); E. cloacae CIP (2%),CIN (23%), NOR (23%) y AcN (23%), M. morganii CIP (19%), E. aerogenes CIP (7%), P. mirabais CIN (2%) y AcN (10%), Ps. aeruginosa CIP (5%), Acinetobacter genoespecies oxidativas CIP (36%), Acinetobacter genoespecies inactivas CIP (5%), S. aureus CIP (1 %), SCN: CIP(2%) y Enterococcus sp. CIP (13%). No se encontró resistencia a CIP en el resto de las especies de enterobacteria. En conclusión, la presencia de bajos porcentajes de resistencia a CIP en la mayoría de las cepas aisladas de pacientes que presentan infecciones adquiridas en la comunidad, permiten que este antimicrobiano pueda seguir siendo utilizado; sin embargo, el uso de la CIP y otras quinolonas, debería ser bien justificado, a fin de minimizar el desarrollo de resistencia.
ISSN:0075-5222
2477-9628