| Summary: | <p>La cocina, considerada como un espacio para la mujer y la preparación de los alimentos, recobra importancia en la cuentística de Elena Garro. Este lugar, además de ser el cuarto para la producción de los alimentos, se constituye como una zona de refugio donde se transmiten los secretos de las mujeres y la historia nacional. En este ámbito se reviven las tradiciones, el folklore y la historia. Para Elena Garro, la cocina también adquiere la función de refugio y conocimiento. En “La culpa es de los tlaxcaltecas” incluido en <em>La semana de colores</em> (1964), la cocina se transforma en el lugar íntimo y privado para las mujeres; y también es allí donde se establece una alianza entre patrona y sirvienta. Este espacio, además, se transforma en el lugar ideal para que las protagonistas se rebelen contra lo convencional y luchen por defender su voz y autenticidad.</p>
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