Summary: | El panorama mundial resultante de la pandemia vivida por el nuevo SARS-CoV-2 y la enfermedad que produce, la COVID-19 ha puesto de manifiesto nuestra fragilidad no solo como individuos sino como sociedad. La gestión de recursos escasos, la transparencia de la información, los riesgos asumidos por los sanitarios, el acompañamiento al final de la vida o la búsqueda de una vacuna segura son solo algunos de los desafíos éticos que han aflorado durante la crisis sanitaria. Previamente, el cine y la literatura ya habían mostrado estos aspectos éticos en situaciones extremas como la actual, basándose en pandemias históricas y otras de ciencia ficción que describen un mundo distópico. La reflexión colectiva y la prudencia deben ser el epicentro que muevan a tomar decisiones solidarias en el ámbito social, científico y político para alejarnos de un futuro desalentador, en el nuevo mundo tras la COVID-19.
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