Paraplejia asociada a la cirugía aórtica

La paraplejia tras la cirugía aórtica es una complicación devastadora. La nueva era de la cirugía endovascular disminuye la morbimortalidad perioperatoria pero no es capaz de evitar el riesgo neurológico. La médula espinal recibe irrigación de la arteria espinal anterior, que se encarga aproximadame...

Full description

Bibliographic Details
Main Authors: María Pilar Lamarca Mendoza, Daniel Paz Martín
Format: Article
Language:Spanish
Published: AnestesiaR 2015-06-01
Series:Revista Electrónica de AnestesiaR
Subjects:
Online Access:http://revistaanestesiar.org/index.php/rear/article/view/187
Description
Summary:La paraplejia tras la cirugía aórtica es una complicación devastadora. La nueva era de la cirugía endovascular disminuye la morbimortalidad perioperatoria pero no es capaz de evitar el riesgo neurológico. La médula espinal recibe irrigación de la arteria espinal anterior, que se encarga aproximadamente de dos tercios de ella (la porción motora), y de 2 arterias espinales posteriores, que se encargan del tercio restante. La arteria espinal anterior se forma a partir de la confluencia de las 2 arterias vertebrales, y suple la parte más craneal de la médula. Recibe múltiples colaterales: las arterias radiculomedulares, lumbares e intercostales, la arteria hipogástrica, la arteria sacra media y la arteria mesentérica inferior. La arteria radiculomedular más importante es la de Adamkiewics, que tiene un curso anatómico variable y suele originarse entre T8 y L1. Tradicionalmente se creía que la mayoría de la perfusión medular dependía de esta arteria, pero actualmente se cree que corresponde a una red de colaterales que conectan numerosas pequeñas arterias entre ellas y con las principales arterias de la médula.
ISSN:1989-4090
1989-4090